Complejo de Princesita Disney.

No sé vosotros, pero yo odio a la mayoría de las princesas Disney.
Sí, tienen historias preciosas con palacios de ensueño y príncipes encantadores que las sacan de todos los problemas en los que se meten. Pero ese precisamente es el problema, al menos en las clásicas.

Venden la imagen de la mujer como alguien frágil, vulnerable, indenfesa. Chicas a las que tienen que salvar hombres para después casarse con ellos y vivir por siempre felices en sus brazos. ¿Que pasa, que ellas no pueden defenderse solas? Quizás sí, pero ese es el 'rol femenino'. El dejarse salvar.

Ahora están las princesas de 'nueva generación', ¿no? Obedeciendo al movimiento feminista de estos tiempos. Chicas con caracter, rudas y peleonas que se saben sacar las castañas del fuego. Pero, ¡oh!, incluso en estas historias también hay siempre un príncipe - chicoguapo que acaba colaborando para que la muchacha alcance su sueño y acaban juntos besándose en alguna estereotipada escena romántica.

Bobadas.

Precisamente ese sentimiento de debilidad. De fragilidad, de vulnerabilidad hacia lo que te rodea. Ese sentimiento de 'como me de algo, me rompe' es lo que se llama 'Complejo de Princesita Disney'. Y he de deciros una cosa, es un ASCO.